El bailaor granadino Rafael Amargo ocupó el foco mediático recientemente tras ser detenido en Alicante, cuando salía de una actuación en esa ciudad, por un supuesto delito de tráfico de drogas que realizaba desde su casa de Madrid. Ahora ha vuelto a comparecer ante los medios y afirma que se ha matriculado para «hacer la oposición de policía».
A pesar de sus diferencias con el cuerpo policial de estos últimos meses, Amargo ha desvelado en unas recientes declaraciones para la agencia Gtres su decisión. El granadino aún no ha comenzado a estudiar y ha asegurado que se apuntó «en un ataque de rabia». A pesar de ello, para el bailaor «es un trabajo precioso» que le ha gustado desde siempre. Además, ha explicado que se rodea de «muchos amigos y familiares policías que son estupendos».
Asimismo, en una entrevista de Espejo Público, ha señalado que lleva dos años y medio pasándolo «realmente mal con tratamiento psiquiátrico». En relación con los hechos de los que se le acusa, Amargo mantiene su versión y asegura que es inocente. «Desde que pasó esta detención no he salido mucho de casa», afirmó en el programa de Antena 3. «Ahora tengo un sueldo básico, un poco más que un mileurista». En esta misma conversación el bailador añadió que hace pocos días «tuvo que darle un mordisco a un policía». Según él, el incidente ocurrió cuando seis agentes le tiraron al suelo con la intención de tranquilizarle: «Yo me defendí y como tenía las manos ocupadas, le di un mordisco a uno de ellos».
Se enfrenta a nueve años de cárcel
Amargo ya fue detenido el 1 de diciembre de 2020 junto a su pareja y otras dos personas en el marco de la operación Codax, cuyo nombre significa «cuervo» en latín y se apoda así por una imagen de Amargo de sus redes sociales en la que aparece con unas alas de esta especie de ave.
Los arrestados -cuatro personas más, entre ellas la pareja del coreógrafo-, quedaron en libertad con medidas cautelares como la retirada del pasaporte, la prohibición de salir del territorio nacional y la obligación de acudir cada quince días al juzgado. Además, la Policía llevó a cabo varios registros.
El bailaor se sentará el próximo junio en el banquillo de los acusados por la presunta comisión de un delito contra la salud pública por la supuesta venta en su propio domicilio de sustancias estupefacientes a terceras personas de manera «persistente» a cambio de dinero.
La vista oral se celebrará los días 7, 8, 9 y 12 de junio en la Audiencia Provincial de Madrid, informaron fuentes jurídicas a las que ha tenido acceso Europa Press. El artista se enfrenta a una petición fiscal de nueve años de cárcel.
